Como definirme..

¿Qué puedo decir cuando no hay nada que decir? ¿Debo pretender estar bien cuando solo quiero gritar hasta quedarme afónica? ¿Seré yo siempre el problema que quiero evitar? ¿Debo dejar de convencerme a mi misma de que estoy bien sola, que no necesito más que la fría soledad?

viernes, 21 de septiembre de 2012

Las chicas de alambre.


Es un libro basado en la realidad, escrito por un catalán: Jordi Sierra i Fabra.
Trata sobre la vida de tres tops models, que llegaron a lo alto con tan solo con 16 años.
Todos los nombres de personas que aparecen en este libro son reales, excepto el de las tres tops models (Cyrille, Jess y Vania).
Cyrille muere por culpa del sida, cuando disfrutaba de su brillante carrera.
Jess por una sobredosis de droga.
Y Vania (Vanessa) de origen catalán, desapareció a la muerte de sus dos compañeras, sin dejar ningún rastro.
El periodista Jon (Jonatan) Boix, de veinticinco años, se encarga de escribir un reportaje (y de paso investigar el paradero de Vania) cuando van a cumplirse 10 años de la desaparición de Vania y la muerte de las otras dos Wire-Girls.
Lo recomiendo completamente J
Un beso.

miércoles, 19 de septiembre de 2012

Que sea el culpable de todas mis sonrisas.

Me encanta cuando miro por la ventana y le veo a él esperándome en el portal impacientemente y que cuando me ve asomada sonríe y me grita que baje. Que cuando me ve bajar por las escaleras cantando me sonría dulcemente y me de un beso en la frente mientras me pregunta: ¿Que tal pequeña? Y yo simplemente sonreiré y le daré un beso, entonces el entenderá que soy feliz al 100%. Me da igual que siempre sea la misma rutina porque amo esa rutina y podré continuar viviendo en ella el resto de mi vida. Y que cada mañana me despierte con un "Buenos días princesa" y que al dormir lo ultimo que vea sea su sonrisa diciéndome "Buenas noches, sueña conmigo". Caminar por la calle dados de la mano y que me susurre al oído lo mucho que me quiere. Que sea el culpable de todas mis sonrisas. Que no me escuche al hablar porque solo me quiere besar. Que sepa cual es mi bebida favorita y cuando estemos en un bar ni siquiera tenga que abrir la boca. Que cuando le diga te quiero nunca me responda con un "y yo a ti".

Piti & Vilma. El barco.

-¿Por que no me has dicho que estas enamorada?
+Porque la gente quiere enamorarse pero yo no, porque terminan dejándome y haciéndome daño, y porque no he tenido suerte, no se, tampoco tenia pinta de tenerla contigo, así que cuando empezaste a gustarme me puse una coraza y me embadurne de grasa para que todo me resbalara pero contigo  no puedo y tengo miedo.
-No tienes por que tenerlo, jamas te haré daño.

domingo, 16 de septiembre de 2012

Me encanta, me encanta..


Me encanta, me encanta abrir los ojos muy despacio por la mañana, volverlos a cerrar muy fuerte, abrirlos de golpe, levantarme de un salto de la cama y sentir que me mareo por haberme levantado tan rápido.
Me encanta, me encanta que me envíen una sonrisa cómplice.
Me encantan, me encantan esas amigas que cuando ven al chico que te gusta dicen “Mira, tu novio” o cuando hablan sobre él, dicen “Pues me encontré a tu novio… jajaja”
Me encanta, me encanta que me enseñen nuevas canciones y nuevos cantantes y luego sea yo quien se lo enseñe a todo el mundo.
Me encanta, me encanta ver a  mi mejor amiga desde lejos, levantar la mano y que al segundo las dos salgamos corriendo a abrazarnos y darnos los dos típicos besos.
Me encanta, me encanta sentarme en el suelo “como los indios” todos en corro hablando de cualquier cosa.
Me encanta, me encanta que me abracen.
Me encanta, me encanta que mi mejor amiga empiece a reírse por cualquier cosa, me contagie la risa y parezcamos dos locas riéndonos sin parar.
Me encantan, me encantan las expresiones de Paula R. “Tía, pero que eso está a mata por culo del páramo.” “¡Pero que pan eres!” “¡A que te aostio!” “¿Me estas pufando?¡ A mi no me pufes eh!”
Me encanta, me encanta bailar con Irene Grandes, con Didi, con mi M.Á. y con las PaulaS.
Me encanta, me encanta poner la música a tope y bailar y cantar hasta caer rendida en el suelo.
Me encantan, me encantan esos instantes antes de dormir, en los que apagas la luz, cierras los ojos y te imaginas historias que te gustaría vivir.
Me encanta, me encanta escuchar canciones e imaginar las historias que cuentan.
Me encanta, me encanta leer novelas y sentirme como la protagonista del libro.
Me encanta, me encanta escribir textos, dedicados a alguien o no, escritos porque me vino inspiración o escribirlos con un “segundo significado especial”.

martes, 11 de septiembre de 2012

Y llego él, como un huracán.



Miraba por la ventana, observando a las personas que realmente eran felices, y las odiaba, odiaba a todas y cada una de esas personas. Pensaba que detrás de cada sonrisa había una historia preciosa de amor, una amistada verdadera y duradera, una familia perfecta sin enfados ni gritos, solo risas, sentados todos alrededor de una mesa disfrutando del día a día, unos estudios impecables, un comportamiento digno de la casa real, una personalidad única y especial, una persona sencilla y sin ningún defecto. Sin embargo ella, ella era la oveja negra del rebaño, la que fallaba en el amor, que cuanto mas daño le hacían mas se enamoraba, la que pensaba tener miles de amigos pero solo eran amistades falsas, una familia en la que había enfados todos los días y nunca se podían estar juntos sin pelearse, nunca disfrutaba de nada, en los estudios siempre rozaba el aprobado, era “mala”, ella solo sabia hacer las cosas de la forma mas complicada y tenia miles de defectos que no podía ni sabia cambiar. Se miraba al espejo y nunca se veía guapa, se veía cientos de defectos horribles, pero apareció él, vino como un huracán que la arroyo sentimentalmente, la hizo cambiar, ya no era ella la que miraba por la ventana, porque se sentía especial y única.